sábado, 4 de octubre de 2008

Desaparecidos: El Pabellón de los Descubrimientos

El proyecto de edificio para el Pabellón de los Descubrimientos responde a una serie de solicitaciones espaciales y funcionales: una edificación de carácter permanente destinada a doble uso (abellón de exposiciones y Domorama) y que constituye formalmente una unidad, pero con funcionamiento como dos edificios autónomos. Asimismo la intención de su posterior reconversión en un museo de la ciencia y la técnica, con un Domorama-Planetario incorporado. La configuración del edificio se determina definiendo una planta rectangular de 126 x 66 m. Sobre ellas se disponen 15 torres estructurales metálicas, separadas 24 m entre sí y que se unen por estructuras de gran canto (puente), determinando ocho espacios vanos entre las torres. Éstas se proyectan de 6 x 6 metros, constituidas por cuatro soportes de esquina (principales), apoyados sobre pilotes, y otros cuatro soportes intermedios (secundarios), sustentados por vigas de atado de los principales.

Maquetas del interior y el Exterior del Pabellón de los Descubrimientos






El Pabellón durante su construcción





Exterior




El asentamiento del edificio sobre el terreno se proyecta con un espacio abierto, de uso , entre el suelo y el primer forjado. Este espacio se localiza en una cota 3 m inferior a la de acceso, creando unos taludes perimetrales entre los dos niveles. De dicho primer forjado arrancan las fachadas que, por consiguiente, lo apoyan sobre el terreno constituyéndose las torres en una especie de patas estructurales. La disposición en altura se establece proyectando siete módulos a partir del citado primer forjado de esta forma se obtiene nueve niveles teóricos que, expresados con una agrupación por analogía de características como contenedores, son los siguientes; Niveles 0 y 8; ambos pueden considerarse espacios abiertos. Niveles 1 y 7; destinados a contener instalaciones técnicas. Nivel 2; constituye la plataforma principal con áreas de exposición, oficinas y acceso al Domorama. Niveles 3 y 6; son los destinados a espacios dispositivos con alturas diversas.

Incendio



El aspecto externo del edificio queda determinado por la estructura muy marcada definida por 15 torres verticales y los elementos de unión entre ellas (puentes). El cerramiento exterior está constituido, con carácter general para todo el edificio, por una malla metálica; si bien diferenciando las zonas estructurales y los vanos entre ellas. La cúpula del Domorama queda excluida de este tratamiento puesto que se ha pretendido que su volumen esférico resaltara como muy diferente de la estructura ortogonal que los circunda; emergen el forjado del nivel dos y se eleva hasta la cota del nivel ocho, en la que, teóricamente se situará uno de los polos.

Decoración tras el incendio





El edificio se incendio antes de que de inaugurase, cuando se estaban colocando los contenidos. Un fuego que duró más de 3 horas y destruyó totalmente el edificio, uno de los más emblemáticos de la muestra. El pabellón fue decorado por Eduardo arroyo y trece años después de la muestra fue derribado, solo el cine Omnimax se mantuvo en activo durante estos años. El edificio se considero una ruina tanto técnica como económica, los equipos del cine se desmontaron y se vendieron.

Arquitecto

Javier Feduchi, intervención tras el incendio Eduardo Arroyo

Año de Finalización

1992

Año del Proyecto

N/d

Estilo

Contemporáneo

Tipo

Pabellón de Exposición con vistas a convertirse en Museo tras la Exposición de 1992

Construcción

Era uno de los proyectos estrellas de la Exposición, entre el WTC, Torre Triana y el Pabellón de la Navegación, debía conformar un espacio de diseño vanguardista. Y así lo pensó su arquitecto, quien creo una maraña de puentes y torres de la que sobresalía la gran cúpula del Domorama. Lastimosamente el incendio acabó parcialmente con sus gran potencial, ya que el cine Omnimax se mantuvo durante años, sin embargo el proyecto de Museo de la Ciencia y la Tecnica, se desvaneció.

Dirección

Desaparecido

Más Información

Arquitectura y Diseño: Expo´92. Electa. Milán 1992.


1 comentario:

Sergio Harillo dijo...

Qué gran pérdida para la ciudad. Este edificio, de haberse conservado intacto, habría venido muy bien por los diferentes usos culturales q podria haber tenido. Y encima, lo único q quedo, el Omnimax, lo derribaron :(

Un abrazo!!